Yummi.
Que el verano ya está aquí no es ningún secreto. Aunque es cierto que en algunos lugares hace más calor que en otros, llegó la época de comernos un heladito mientras nos damos un paseo, estamos en la playa, o en casita resguardados de los rayos del sol. La operación bikini ya no tiene sentido, os lo dice una que ya se ha dado por vencida. Así que hoy os quería enseñar dos recetas para poder hacer helados en casa.
El primero es un helado “light”. Se trata de un helado de arándanos. Ideal para las que queráis cuidar un poco la dieta, o para que los peques coman fruta de una forma divertida.
Pretty Prudent |
La otra receta es un poco más calórica. Están hechos en un plis plas, y los podéis hacer con los peques para que después se los puedan comer de merienda. Sólo necesitáis helado (mejor si es de nata o vainilla para que no se mezclen demasiados sabores) y toppins, como por ejemplo m&m, lacasitos…
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¿Habéis hecho alguna vez helados? |
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